La Justicia francesa condenó este jueves a 20 años de cárcel a Dominique Pelicot, hombre acusado de drogar y violar a su exesposa Gisèle Pelicot y reclutar a más de 50 hombres para abusar de ella durante diez años.
El exmarido ha sido declarado culpable de los cargos de violación agravada, entre otros delitos, y recibió la pena máxima estipulada en la ley francesa.Todos los acusados en este histórico proceso han sido declarados culpables por el tribunal, en su gran mayoría por violación agravada.
Sumado a lo anterior, juez encargado del caso consideró, además, que Dominique Pelicot no solo era culpable de los delitos de violación agravada sino también de tomar imágenes indecentes de su hija, Caroline, y de sus nueras, Aurore y Celine y de violar a la mujer de Jean Pierre Marechal.
En concreto, Pelicot, de 72 años, deberá cumplir al menos dos tercios de su condena entre rejas y después tendrá la oportunidad de acceder a la libertad condicional.
Por otra parte, las penas menos severas ascendieron a tres años y el total de las condenas para los 51 acusados ascendió a algo más de 400 años de encarcelamiento, una cifra significativamente inferior a los 652 años que sumaban las penas reclamadas por la Fiscalía.
Recordemos que fue la misma Gisèle quien decidió renunciar al anonimato y sacar a la luz este juicio, haciendo, según sus palabras, que "la vergüenza cambie de bando", de la víctima al violador.Aunque Dominique Pelicot admitió los cargos que se le imputan, la mayoría de los demás hombres juzgados niegan que lo que hicieron fuera una violación.
Sin embargo, la mayoría de los ahora condenados, había alegado que, al tener el consentimiento de su marido, pensaban que se trataba de un "juego sexual con un matrimonio libertino" -y, por lo tanto, no era violación lo que estaban haciendo- . No obstante, el tribunal desestimó estos argumentos.
Repercusiones por las penas dictadas
Debido a que seis de los acusados quedarán en libertad, ya sea porque las penas están exentas de cumplimiento en la cárcel o porque ya han cumplido parte de ellas en detención provisional.
Lo anterior, sumado a que varios de los condenados no deberán ingresar en prisión, desató inmediatamente el disgusto de los cientos de personas que se habían apostado desde primera hora para seguir el juicio y respaldar a la víctima.
"Vergüenza de Justicia", gritaron muchos de los presentes, la mayoría de ellos mujeres, que se sumaron a las convocatorias de las asociaciones feministas francesas que han estado acompañando este proceso durante algo más de tres meses.
Con todo, cabe puntualizar que hasta el momento, Gisèle Pelicot no ha entregado declaraciones públicas.