Este martes 23 de julio, más de 4.500 manipuladoras de alimentos pertenecientes a la Confederación Nacional de Trabajadoras del Programa de Alimentación Escolar (Confetrap) han iniciado un paro indefinido en todo el país, en protesta por el no pago completo de sus finiquitos tras ser desvinculadas hace cerca de cinco meses.

Las trabajadoras afectadas, quienes estaban bajo la administración de la empresa Las Lagunas en colaboración con la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb), reportan que el acuerdo de pago de sus finiquitos se estableció en dos etapas, con la última venciendo el pasado domingo 21 de julio. A pesar de que se cumplió con la primera parte del pago en marzo, la segunda parte acordada no se materializó.

Esta situación llevó a las manipuladoras de alimentos a movilizarse y realizar manifestaciones este lunes en diversos puntos de la región Metropolitana, incluyendo Peñalolén, La Florida y Recoleta, donde instalaron barricadas y exhibieron pancartas exigiendo una solución inmediata a sus demandas.

Alejandra Muñoz, presidenta de Confetrap, declaró que el número de afectadas asciende a 4.638 mujeres, cada una de las cuales debería recibir entre $1.300.000 y $1.500.000 de acuerdo a los montos adeudados. A pesar de sostener una reunión con representantes de Junaeb durante la jornada, no se logró alcanzar un acuerdo que satisficiera a las trabajadoras en conflicto.​